A 5km de Fraga, noto que algo no va correctamente, pierdo dirección ¡¡¡He pinchado!!! Y a preno sol decido empujar la bici hasta la ciudad, al mismo tiempo que recuerdo que el día siguiente es domingo y las tiendas de reparaciones estan cerradas.
Al llegar, con mucho esfuerzo, me comentan que los sábados por la tarde estan cerradas, "PROBLEMÓN".
Llego a la parroquia para pelegrinos y me manda a un camping donde me asignan un bungalog para mí solo, eso si, me dice que si llega alguien más (pelegrino) lo tendré que compartir.

Le comento a los del camping el problema con la rueda y me dicen que no pueden hacer nada. Me resigno, tendré que pasar el domingo allí.

A eso de las 10h suena un " pog pog" en la puerta y es un chico, un tal Carlos que se ofrece a ayudarme para poder seguir la ruta.
Como agradecimiento le invito a unas cañas hasta las 12h, me despido y me voy a dormir pensando que a Sant Jaume le mandaron dos ángeles para sacarle la espina, pero a mi me mandaron uno paa arrerglarme el pinchazo.